jueves, 27 de mayo de 2010

Por fin.

Que sí. Ya sé que aún no he subido las fotos ni los comentarios acerca de Dublín...
Mientras tanto, diré que esta semana el calor ha empezado, las tardes con los pedugos son insufribles y la jornada continua viene a rescatar a los maestros a partir del lunes próximo.
¡Jamás el calendario escolar y el tiempo atmosférico se habían puesto de acuerdo con tanta precisión!
Aunque claro, podría recordar una vez más que sólo en Aragón, Cataluña y Valencia seguimos teniendo impuesta la jornada partida en Primaria. Pero algo me dice que esto puede cambiar pronto...

sábado, 15 de mayo de 2010

El famoso cinco por ciento.

Ojalá lo del cinco por ciento cambie enseguida y este comentario se quede obsoleto muy pronto.
Pero quisiera exponer con varios sencillos argumentos por qué estoy en contra de que se le reduzca un cinco por ciento (de media, ya veremos luego a cada cual cuánto le toca) el sueldo a los funcionarios y luego se le congele.
- La primera razón, desde luego, es porque yo soy uno de ellos y me va a tocar. Está claro que no me puedo poner a dar botes de alegría.
- La segunda es ésta. Aparentemente tiene lógica decir que como el Estado debe gastar menos, quienes son trabajadores del Estado han de cobrar menos. Eso tiene muchos matices. Para comenzar, para que el Estado tenga más dinero no sólo se puede gastar menos sino también recaudar más. Por otra parte, hay reducciones admisibles (menos subvenciones, o por menos tiempo, o despachos menos ostentosos, etc.) y otras que no lo son, pues una persona que ha estudiado y superado una oposición no puede ver mermado su sueldo mensual y por tanto sus derechos económicos.
- La tercera razón, muy en relación a la anterior, es que trabajar para el Estado no le hace a uno ser más del Estado que una persona no funcionaria. El Estado está hecho del dinero de todos, todos nos beneficiamos de él y por tanto hemos de ser todos quienes colaboremos, cada uno en la medida de sus posibilidades (aunque en realidad, ya lo sé, ningún españolito modesto tiene la culpa de la crisis), a solventar el problema económico actual. Si yo gano mil euros y soy funcionario, perderé el 5% de mi sueldo, pero uno que camina a mi lado por la calle y gana dos mil no perderá el 5%. ¿Es eso justo? Si alguien sostiene este argumento de animadversión hacia el funcionario, como si por serlo no diese palo al agua, que lo diga y empezaré a dudar sobre su capacidad para razonar y ver las cosas con lógica. Pues está claro, y que conste que no me gustaría tampoco esta medida, que aumentar del 2% a por ejemplo el 5% el IVA de Junio sería más justo pues incluiría realmente a todos.
- La cuarta razón, consecuencia de la anterior, es que tendré que perder el 5% de mi sueldo como funcionario y pagar el 2% más de IVA como ciudadano español... Cualquier filósofo o cualquier persona mínimamente puesta en lógica estará de acuerdo en que de eso se deduce que los funcionarios no son ciudadanos españoles o al menos que los ciudadanos españoles no son funcionarios, o cualquier cosa absurda del estilo. ¿Por qué debo salir perdiendo por dos razones diferentes?
- Y por último, toca mencionar que los funcionarios -pues no es la primera vez que se congelan o reducen sueldos- ven mermados sus derechos en época de crisis, y con el apoyo de quienes no lo son con el argumento de "ya tienen sueldo fijo, así que no deben quejarse", pero una vez la crisis pasa, o pase, no se nos restablecerá lo perdido y nadie se acordará de nosotros, porque claro, seguiremos teniendo un sueldo fijo y eso nos quita la palabra y la razón. Como si eso nos hiciese más ricos que otros.


Ahora mismo, si tuviese que votar, lo haría en blanco.