lunes, 31 de marzo de 2008

martes, 25 de marzo de 2008

Microrrealidad.

Llegando al pueblo donde trabajo, mientras ejercía las relajadas obligaciones del rol de copiloto, disfruté de una vista general del lugar y observé el pequeño cementerio que se encuentra pudorosamente separado por unos centenares de metros del resto de la localidad. Me dio por pensar que resultaba muy desagradable, sobre todo si uno vivía allí y tenía pensando pasar el resto de sus días en ese sitio, saber el lugar exacto en que iban a terminar nuestros restos.
Pensé de inmediato que lo mismo era viviendo en una ciudad como Zaragoza. Pero tener el cementerio algo a desmano hace que no pensemos mucho en la muerte y nos sorprenda tanto cuando nos pasa de cerca.
Luego vi también las casas, la iglesia, las fábricas donde trabajan los padres de muchos de mis alumnos, las vías del tren... Y me hizo gracia descubrir lo obvio: que un pueblo es una sociedad diminuta. Me pareció de repente divertido darme cuenta de que el pequeño tamaño del lugar simplificaba la vida o su apariencia, y uno podía empezar a imaginar con facilidad el día a día de cualquiera de sus habitantes: aquí vive, anda dos minutos y ahí se toma un café, anda otros dos y allí deja al niño en el cole, anda tres más y trabaja, sale y llega a casa atravesando tres calles, y así. Todo se convertía en un movimiento aséptico, cual personaje de videojuego, y le quitaba la magia, quizá humo pero magia, de la grandiosidad urbana y el creernos mucho más libres.

La vida da muchas vueltas. Pero aquí y ahora afirmo que a no fumar y a no tener hijos añado otra idea segura: no vivir en un pueblo pequeño. Ciudad forever, con sus peros incluidos.

viernes, 21 de marzo de 2008

En Zakopane, al sur de Cracovia.

La primavera ha llegado a Polonia. Menos mal.

lunes, 17 de marzo de 2008

viernes, 14 de marzo de 2008

Gastos mundiales.

El planeta invierte anualmente en miles de millones de dólares:
- En educación para todos: 6.
- En consumo de cosméticos: 8 en ee.uu.
- En agua y sanidad para todos: 9.
- En consumo de helados: 11 sólo en Europa.
- En atención ginecológica para todas las mujeres: 12.
- En perfumes: 12 sólo en Europa y ee.uu.
- En necesidades básicas nutricionales y sanitarias: 13.
- En alimentos para animales: 17 en Europa y ee.uu.
- En cigarrillos: 50 sólo en Europa.
- En bebidas alcohólicas: 105 sólo en Europa.
- En estupefacientes: 400.
- En publicidad: 400.
- En gastos militares: 780.

¿Cuánto costaría el acceso universal a una alimentación adecuada junto con el agua potable, las infraestructuras sanitarias y la educación básica?: unos 40.

lunes, 10 de marzo de 2008

Novela recomendable.

"A primera hora de la mañana, un hombre con dos bolsas llenas de libros llegó a la librería de Andrea. Andrea lo saludó y él respondió el saludo muy educadamente. Ella le preguntó entonces en qué podía ayudarlo y él dijo:
- Estos son libros que me robé de esta librería. Ya los leí, así que vengo a devolverlos.
Pensando que había entendido mal, Andrea le preguntó:
- ¿Usted me está diciendo que estos son libros robados y viene a devolverlos? ¿Por qué viene a devolverlos después de tanto tiempo?
- Porque ya los leí -dijo él-. Ya no los necesito.
Andrea no sabía qué decirle, no sabía si aquel hombre estaba tomándole el pelo.
- No se preocupe, que están bastante bien conservados - dijo él, muy amablemente, entregándole las bolsas.
Andrea echó una mirada a los libros y calculó que había quince o veinte novelas en cada bolsa.
- Los necesité para no suicidarme cuando me dejó mi novia -dijo él-. Pero ya me enamoré de nuevo. Ya no los necesito.
Luego le dio la mano y se marchó.

(Y de repente, un ángel. Jaime Bayly).

viernes, 7 de marzo de 2008

Chez Carolina.







Vaya usted a cenar a Carolina´s Restaurant y se sorprenderá de la amabilidad de su cocinera. Siempre sonríe, prepara platos a gusto del consumidor y no le importa que los clientes nunca le correspondan invitándola a ella o preparándole comidas al mismo nivel y calidad.





En la foto, en plena faena. No importa que usted se ofrezca a llevar pizzas: ella estará en la cocina dos horas preparando ensaladas sin lechuga y crepes de nocilla. Y otros manjares.





lunes, 3 de marzo de 2008

The older, the faster.

Un curso escolar es lo más repetitivo y cíclico del mundo: días, semanas, meses, trimestres, cursos, ciclos, etapa. Todo está predefinido.
Quizá sea por eso por lo que cada vez se me pasa más deprisa todo. Llega el lunes, que se coge con desgana; el martes va pasando algo mejor pero cuesta; el miércoles en mi cole empiezan a visitarnos los maestros itinerantes que imparten las especialidades y el jueves y el viernes de por sí ya van, como suelo decr, cuesta abajo.
Por fin llega el fin de semana, y uno queda con los amigos, ve a la familia, lee, hace el tonto por internet, ve una peli, y el domingo por la noche llega normalmente mucho antes de lo esperado.
Y otra semana vuelve a comenzar.

La cosa tiende a pasar más bien rápida. A lo tonto, acabamos de empezar marzo, llegan en breve días de fiesta y comenzará el tercer trimestre. ¡Ya! ¡Parece increíble! ¡Pero si quedan apenas tres meses de curso largos!
¿Será entonces cierto eso tan trillado de que cuanto mayor es uno más rápido pasa el tiempo? Parece que la respuesta es sí, al menos desde mi subjetiva opinión visto lo visto estos dos últimos años. En nada deberé plantearme qué viaje hacer este verano, ¡pero si hace nada acababa de volver de Polonia!

Esta rapidez de las cosas es una razón, una razón más, para vivir los días de otro modo: no pensando en que llegue el viernes, no pensando en que termine la jornada laboral, no pensando en que llegue el puente, sino saboreando cada día por sí mismo. De nuevo recurro a lo trillado, a lo mil veces dicho.

Pero será por algo.