
Heme aquí con dos compañeros del piso de Daroca en el que estamos alquilados.
A la derecha, Marta, maestra de la especialidad de Audición y Lenguaje, de ésas que se dedican a coger a los niños con problemas y a hacerles pronunciar la r y cosas así.
En el centro, Sergio, de la especialidad de música y secretario del cole en su tiempo libre. Ahí no se ve, pero iba en mallas y se acababa de depilar las piernas. Vamos, que parece mentira que el gay sea yo.
El de la izquierda soy yo. Creo.
Hace la foto mi compañera del cole, que no aparece no porque mi cámara cutre de cincuenta euros del Alcampo no tenga disparador automático, sino porque afirmó manifestar rechazo a aparecer en Internet. Respetemos, pues, su decisión y aceptemos su presencia como ejecutora de la instantánea.
Postadata: las cortinas del fondo son culpa de la dueña.