Este martes terminé, por fin, mis visitas al dentista. Para una lista detallada de lo que me han hecho en la boca les remito a ustedes a un post de agosto o septiembre. El hombre me regaló un cepillo y pasta de dientes. Qué menos, se va a poder ir de vacaciones una semanita a mi costa.
Pero todavía no ha acabado todo. Planeo regresar de mis vacaciones de navidad con una ortodoncia en la boca para intentar que los piños superiores no sobresalgan como hasta ahora. Así que próximamente visitaré a otro dentista -porque éste no lo hace- a ver si me coloca unos aparatos discretos que puedan hacer algo.
Mientras tanto, queda claro, aparte de en los ojos, en qué nos parecemos mi hermano y yo:
2 comentarios:
¡Ostras! Os parecéis un montón, y no sólo en los piños... es que sin la máscara de Scream no lo reconocía
Como 2 gotas de agua xD
Yo tengo el diccionario colliiins jajaja
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